El mundo del porno sigue estando muy de moda, aunque para muchos sea un sector totalmente anticuado y falto de elegancia y glamour. La industria sigue creciendo a pasos agigantados y una vez que Internet ya se ha convertido en una herramienta más en su expansión, el porno se ha acomodado en una situación excelente. Llega cada vez a más gente, e incluso comienza a tener espectadores más jóvenes. Está claro que este tipo de películas pueden no ser precisamente adecuadas para menores, pero también es verdad que todos hemos visto porno cuando éramos chicos. La curiosidad nos podía, y terminábamos buscando esas revistas de nuestros padres o hermanos mayores, donde aparecían mujeres desnudas. La diferencia es que ahora el porno es accesible desde cualquier lugar, con esos pequeños aparatos electrónicos que siempre llevamos encima. Los smartphones han convertido al porno en tendencia, y eso es algo que la industria está aprovechando para no parar de crecer y llegar siempre más y más lejos.
Tanto es así que hoy en día no es extraño encontrarnos a pornstars, tanto actuales como ya retiradas, convertidas en influencers de las redes sociales. Su fama les permite amasar millones de seguidores que son muy interesantes para ciertas marcas, las más atrevidas y arriesgadas, que no tienen problema en que sus productos sean relacionados con este tipo de actrices. Antes, una actriz porno quedaba “marcada” para siempre por su participación en estas películas. Ahora, las chicas jóvenes llegan ya muy bien formadas a la industria y saben poner límites cuando se traspasan ciertas situaciones. No son muñequitas con las que unos cuantos puedan jugar a su antojo. Cuando dejan la industria llevan a cabo proyectos de moda, diseño, maquillaje e incluso cultura. Es una nueva era en la que las actrices porno pueden brillar frente a la cámara, pero también alejadas de ella, demostrando que su talento va mucho más allá del sexo. De entre esas nuevas pornstars hay un sector que está llamando especialmente la atención: las mujeres caribeñas. Son chicas voluptuosas, sensuales y muy ardientes, que se han convertido en las favoritas de muchos. Aquí te vamos a hablar de las más populares pornstars cariberñas.
Diamond Kitty
Y empezamos con una auténtica leyenda del porno, una actriz que lleva ya más de una década en la industria y que ha sabido hacer esa transición de joven a madurita de una manera impecable. Diamond Kitty es sin duda una de las mejores exponentes del porno latino, y es que esta morenaza tan exuberante nació en La Habana, capital de Cuba, hace ahora 37 años. Sus escenas la han llevado a convertirse en una de las firmes candidatas a mejor actriz latina de la última década, pero es que va mucho más allá. El porno le ha servido de trampolín para crear sus redes sociales con un seguimiento brutal por parte de millones de fans. Y es que Diamond Kitty no es solo una mujer exuberante e intensa, sino que además posee un carisma espectacular que nos hace volvernos locos con ella al instante.
Daisy Cruz
Coetánea de nuestra anterior estrella, Daisy comenzó en esto del porno siendo realmente jovencita, y lleva desde entonces más de dos décadas dedicada a este cine. Es cierto que no ha grabado tantas escenas como uno podría imaginar durante todo este tiempo, pero ha sabido mantenerse siempre como una de las latinas más recurrentes en las grandes productoras. Su belleza racial y su espectacular físico, unido a sus tatuajes, hacen de ella una chica irresistible. Y además sabe cómo ponernos bien cachondos cuando lo hace delante de la cámara, dándolo todo y disfrutando del sexo más salvaje. Daisy también ha conseguido despuntar en redes sociales, e incluso se ha lanzado a grabar algunas canciones de estilo urbano latino, para probar suerte en la música. Por ahora, nosotros la preferimos delante de la cámara, eso sí.
Abella Anderson
Otra de esas latinas que no dejan indiferente a nadie. Anderson también procede de Cuba, aunque se mudó muy pronto a Estados Unidos con su familia. Allí encontró su verdadera vocación en el mundo del porno, convertida en una amante de lujo que lo daba todo frente a la cámara. Durante diez años se mantuvo activa, pero seguramente empezar con apenas 18 le marcó demasiado. Cansada de hacer películas en un momento en el que además el porno estaba en transición a Internet, la chica abandonó la industria en 2017. Sin embargo, sus vídeos siguen siendo muy visitados en las plataformas porno, y es que pocas chicas han representado mejor el papel de petite latina como Abella. Actualmente, Abella se encuentra alejada de las cámaras, aunque sus fans suspiran por volver a tener noticias de ella muy pronto.
Skylar Snow
Y ahora vamos a cambiar un poco de tercio, para dejar atrás ese prototipo de morena de ojos marrones que hemos tenido hasta el momento. Vamos a hablar de la preciosa Skylar Snow, una joven puertorriqueña que demuestra que el Caribe conoce muchos tipos de belleza, y la suya es imposible de dejar a un lado. Esta rubita ha sido una de las sensaciones en los últimos años, convirtiéndose en una de las actrices más de moda. Sus escenas lésbicas la han hecho famosa, pero se atreve incluso con dobles penetraciones, porque a esta chica no le asusta nada. Ha utilizado en los últimos años su fama como pornstar para lanzar también su carrera como modelo, realizando campañas para ciertas compañías, sobre todo eróticas. Snow es una chica exótica en Puerto Rico, pero actualmente se ha mimetizado a la perfección con su ciudad, Los Ángeles.
La Sirena69
El caso de Antonella, alias la Sirena69, es realmente peculiar. Esta venezolana nacida a orillas del Caribe no comenzó en la industria hasta los 29 años, hace relativamente poco, de hecho. Su ascenso, sin embargo, ha sido fulgurante. Su cuerpo exuberante, su morbo latino y esa manera de cautivar a la cámara, con una mirada cargada de sensualidad, hacen de ella una chica irresistible. Y parece tener muy claro lo que quiere, ya que como muchas otras chicas, LaSirena está ahora ganando más dinero con su propio material, en su web y en Onlyfans, que a través del porno. Ha utilizado la industria para darse a conocer de forma masiva, pero ahora quiere ir por libre y lo cierto es que no le va nada mal. Con casi 3,4 millones de seguidores en Instagram, es seguramente la pornstar latina más seguida de toda la red.